8 de septiembre 2018. Un problema de seguridad con el que no contábamos obligó a trasladar al resto de los niños desde Rugari al nuevo edificio en Rumangabo.

El traslado se hizo de forma precipitada, en moto y atando con cuerdas desde colchones a todo lo imaginable como buenamente se pudo… y también los mayores se fueron con sus compañeros.

Ya están todos juntos y a salvo en el único edificio construido hasta ahora. En principio estaba previsto solo para las niñas, pero en Congo hay que saber improvisar… así que, primero se ubicó allí a los más pequeños y ahora, pequeños y mayores, vuelven a estar juntos hasta que algunos puedan trasladarse al segundo edificio que estamos a punto de empezar.

De momento, el parque de Virunga permanece cerrado por motivos de seguridad. Hay elecciones en diciembre de este año y el parque no está previsto que reabra al menos hasta enero de 2019. Hasta entonces, la seguridad ha pasado a ser la prioridad número uno. Así que, añadimos al proyecto una valla sólida que permita controlar quién accede al recinto.